Del pasado al futuro: el Castillo de Dromoland apuesta por la energía solar con módulos LONGi back contact

Date
July 25, 2025
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En el corazón del condado de Clare, en la pintoresca costa oeste de Irlanda, el Castillo de Dromoland está escribiendo un nuevo capítulo en su historia. Este majestuoso edificio del siglo XVI, famoso por su arquitectura impecable y su pasado lleno de historias, lleva más de seis décadas recibiendo a huéspedes como hotel de lujo. Hoy, sin embargo, su apuesta va más allá de la hospitalidad: ha incorporado un moderno sistema de energía solar que demuestra que tradición y sostenibilidad pueden convivir perfectamente. Con esta instalación, el castillo no solo reduce su huella ambiental, sino que también asegura beneficios operativos a largo plazo, todo sin perder ni un ápice de su encanto histórico.

Una instalación solar moderna en una finca histórica
De la mano de nuestro socio MarVal Power, el Castillo de Dromoland ha dado un salto al futuro con la instalación de un sistema solar de 261 kilovatios pico (kWp), compuesto por 608 paneles de la serie Hi-MO X10 de LONGi. Aunque el clima irlandés no siempre es amable —con sus cielos encapotados y lluvias frecuentes—, se estima que este sistema generará unos 203 megavatios hora (MWh) de electricidad limpia al año. Una producción suficiente para cubrir una parte importante de la demanda eléctrica del castillo, reduciendo así su dependencia de la red y aportando estabilidad a los costes energéticos a largo plazo.
Reduciendo emisiones y costes de operación
Al producir su propia energía renovable, el Castillo de Dromoland evitará la emisión de alrededor de 25 toneladas de dióxido de carbono cada año. Un paso que se suma a los esfuerzos de Irlanda por reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y apostar por fuentes más limpias. Pero el impacto no es solo ambiental: también hay un beneficio directo en la factura eléctrica, algo especialmente relevante para negocios con alto consumo, como los hoteles. A largo plazo, la combinación de ahorro energético y la mínima degradación de los paneles convierte esta inversión en una decisión financieramente sólida.
LONGi Hi-MO X10: eficiencia en un clima exigente
Para este proyecto, se eligieron los módulos back contact de alta eficiencia de LONGi, reconocidos por su rendimiento y durabilidad incluso en regiones con radiación solar moderada. Cada panel ofrece una potencia excepcional, con una eficiencia de módulo de hasta el 24,8% y de célula que alcanza el 26,6%. Además, su bajo coeficiente de temperatura (-0,26% por cada grado Celsius) garantiza un rendimiento estable incluso en días más cálidos. Gracias a la tecnología back contact y la ausencia de busbars en la parte frontal, se reducen las pérdidas por sombreado y se logra una integración estética con la cubierta del castillo.
Preservar la historia mientras se abraza la energía renovable
Uno de los grandes retos en proyectos como este es no alterar el carácter histórico del edificio. En Dromoland Castle, la instalación se llevó a cabo con especial cuidado para mantener la integridad visual de la finca. Los paneles se ubicaron estratégicamente para que pasen desapercibidos, sin afectar la experiencia de los huéspedes ni el encanto arquitectónico del lugar. Este proyecto demuestra que incluso los edificios protegidos pueden adoptar tecnologías renovables sin sacrificar su valor patrimonial.
“Los edificios históricos tienen un papel importante en la transición energética, y es inspirador ver que sostenibilidad y preservación pueden ir de la mano. El proyecto del Castillo de Dromoland es un ejemplo de cómo la tecnología solar moderna, cuando se elige e instala con cuidado, puede contribuir a los objetivos climáticos sin comprometer la integridad arquitectónica o histórica. Nos enorgullece que nuestros módulos Hi-MO X10 back contact hayan formado parte de una iniciativa tan bien pensada y con visión de futuro”, comentó Will Han, Director General para Europa del Norte de LONGi en Generación Distribuida.

Marcando el camino hacia un patrimonio histórico más sostenible
La instalación solar del Castillo de Dromoland es una prueba clara de que las propiedades históricas también pueden adoptar soluciones energéticas modernas de forma responsable y eficaz. Con un diseño cuidado y la tecnología adecuada, es posible aplicar medidas de sostenibilidad incluso en los entornos más tradicionales. Este proyecto refleja una tendencia creciente en la industria hotelera, donde la eficiencia energética y la responsabilidad climática se han convertido en piezas clave de la planificación a largo plazo.